viernes, 23 de marzo de 2018

Fue el mayordomo


*Conferencia del escritor Lorenzo Silva en la Residencia General Barroso
"El novelista como testigo de su tiempo y lugar"

                                 (Fotografía de El Correo Gallego)

   Tiene varios amigos en la Guardia Civil. Las historias sobrecogedoras que le cuentan y las pulsiones de los asesinos sirven como guión para sus novelas policíacas.Puede documentarse viendo The Wire. “El morbo que sentimos por lo escabroso, sórdido, el mal y las bajas pasiones”.
   Cuando empezó a escribir literatura,a los trece, creía que la herramienta fundamental era la  imaginación. Tardó en percibir que intervienen mucho los ojos y oídos. Observar con detalle a personas, lugares y momentos. Y además escuchar e interpretar el lenguaje de los demás.

   “Escribir una novela es agarrar todo lo que tienes,capacidad, memoria,corazón e imaginación y meterlo en 300 páginas. Eso no es un hobby”.Pero hay dos problemas. El miedo a la página en blanco.  “He sudado escribiendo un renglón y tachándolo”. El otro cliché es el bloqueo.  Una zanja donde te empantanas semanas. “En mi primera novela me bloqueé a las 250 páginas; sentí tal frustración que la acabé incinerando”.

   Una de las novelas de Silva la prologó Paul Preston. El británico decía que la obra de Galdós guarda un material fundamental.  Benito trabajaba tres o cuatro horas por la mañana y luego iba al mercado. Si cogía un tren prefería ir en tercera clase. Todo por escuchar al pueblo.  Él era un maestro de los idiolectos. La forma de hablar identifica el carácter,condición y personalidad de los personajes.  Narra con mucha vivacidad la Sargentada de San Gil de 1866 en la que fusilaron a varios de ellos. “Madrid en verano es un infierno con 39 grados a las once la noche”. Tiempo atrás Noches áticas de Aulo Gelio nos enseña la sociedad romana de forma admirable.
  Abordó el estudio de la Guerra de Marruecos, 1909-27 donde murieron carca de 80.000 españoles. Este conflicto acabó precipitando la República. Cree que “novelas de verdadero mérito” solo hay un par, de Arturo Barea y Ramón Sender. Y ambos se centran en el Desastre de Annual. “El problema es que en España la intelectualidad no se arremangó para ir al acontecimiento”. Por ejemplo Robert Graves escribió Adiós a todo eso en las trincheras de la Gran Guerra.
   Rosa Navarro Durán analizó el Siglo de Oro a partir de estudios literarios y no históricos. Se centró en dos corrientes, la picaresca, por un lado, y la celestinesca que analiza las relaciones personales.  “A Cervantes nos lo dieron ya canonizado en un pedestal”;  analizó su tiempo con maestría sin evitar las partes más escabrosas. En El Quijote se habla del sistema penitenciario en el pasaje de los galeotes. No solían sobrevivir más de tres años.La Santa Hermandad era un cuerpo corrompido.En El Coloquio de los Perros eran los pastores quienes mataban a las ovejas.

lunes, 19 de marzo de 2018

Asechanzas a los peregrinos

*Ponencia que realizó José Carro Otero en el Hostal de los Reyes Católicos
durante el Ciclo ¿A dónde vas, peregrino?
Organizado por la Archicofradía del Apóstol



   Reconoce Carro Otero, comisario del Xacobeo 93, que entonces hubo un intento de violación a una monja. Se decidió ocultar la noticia para evitar alarmismos.

   Una de las fuentes investigadas son los informes portazgueros. Como curiosidad, a los Sumos Sacerdotes se les llama Pontífices pues son hacedores de puentes hacia la Divinidad.

   Los peregrinos deberían están exentos  del pago en los puentes. Pero les hacían pagar abusivamente. Incluso a veces le pegaban y coaccionaban. En Saint-Jean-Pied-de-Port, paso de montañas del Pirineo, les amenazaban con dardos y azagayas.  El Calixtino  culpa a los señores de esos lugares por permitir esas malas praxis.
   Este mismo códice ya daba consejos de como cruzar un río con un caballo. En el Libro V se habla de “ímpíos vascos y navarros”. Algunos de ellos robaban, vejaban a los romeros, los colgaban a cuatro patas e incluso llegaban a asesinarlos.

   Tirso de Molina recoge casos de violaciones en La romera a Santiago. Ridiculizaban a alguien de menor rango de modo prepotente. Hay una coda ejemplarizante. Empleaban el escarmiento como castigo.
   Se documentaron agresiones de perros adiestrados,lobos, serpientes,basiliscos,insectos pon-zoñosos…   El báculo servía de protección ante canes, símbolo de tentación, y lobos, el pecado.
   Los perturbados suelen actuar sobre los que van solos. Era recomendable ir en grupo para aportar mutuo apoyo en casos de lesión, caída por un precipicio… 

   Hay casos de violencia de género, a veces frustrados. Incluso uno cometido por una mujer hacia un hombre en Toulouse en el 1090. En ciertos mesones había prostitución.

   “El Camino de Santiago no debería ser fijo. Solo hay dos puntos claros: la salida en tu casa y la meta en la tumba de Santiago. Finisterre ni siquiera es el fin del mundo conocido sino que lo es el Cabo de Roca.   En Fisterra no hubo culto cristiano, sino solar mediante el “ara solis”. Querían que no se apagase y hacían hogueras para que el Sol se mantuviese activo.
   Nicola Albani fue un peregrino italiano que vino dos veces a mitad del XVIII. Reprodujo la frase “quien no ve Lisboa no ve cosa buena”; allí había agencias comerciales italianas que al final lo llevan de regreso.    Antes, en Redondela le quiso abordar una peregrina. Bajando hacia Ponte de Lima sufrió una tentativa de robo con violencia. Era un bandolero peligrosísimo con espada. Él mismo contó a las autoridades la hazaña; le aconsejaron que huyera rápido y hasta le prestan una mula. 
 
   También hubo envenenamientos a cargo de malos hospederos. Así se apropiaban de sus pertenencias. No había medios de comunicación para denunciar y propagar la noticia.

   Curiosa es la agresión de un peregrino a sí mismo Aparece en el Milagro 17. El caballero Isberto, peletero de profesión, venía de Lyon.   Era un solterón de vida casta que venía cada año a Compostela. En su último viaje viene en grupo; se le aparece el demonio con forma del Apóstol durante un sueño; le dijo que estaba en pecado por haber fornicado con una mujer. Para expiar sus culpas debía amputarse los genitales. Bajo esta sugestión coge el cuchillo y se lo clava en el pecho. Sus compañeros escaparon pensando que los podían acusar a ellos.  Cuando ya se daba por muerto resucita y enseñó sus cicatrices.

   No era poca la picaresca en las posadas. Les cobraban abusivamente, les daban carne o pescado de mala calidad o le deban a probar vino bueno y luego se lo cambiaban por el malo. No le servían agua para cobrarle el vino.  Estos caldos bebidos en exceso provocan lujuria, incitan a la violencia y a decir tonterías. Les emborrachaban para robarles. Metían objetos de valor junto a sus pertenencias para luego acusarlos de hurto.  

   El área comercial de Compostela era en la Plaza de Azabachería. Compraban velas para hacer ofrendas y se las daban alteradas. Adquirían telas para su indumentaria. En el cuero les daban “gato por liebre” diciendo que era de ciervo.   En Platerías vendían especies y hierbas medicinales: romero, hierba luisa, laurel…  Los médicos falseaban las recetas…  

   Los cambistas podían darles falsa moneda. A veces estaban machacadas porque le quitaban metal pero no extrañaba porque eran siempre piezas irregulares. Hubo compostelanos avergonzados que crearon la Comitiva de los Cambiadores para que los cambios fuesen justos.

   A un falso penitenciero le pedían que encargase un número de misas y se las cobraba él. “Hay muy pocas cosas nuevas bajo el sol”.

   En conclusión, primaba la codicia. ”Se apagaban los sentimientos del alma sin tener en consideración a los demás”. El ser humano es capaz de los actos más abyectos.  Dijo San Pablo “el que sirve al altar debe vivir del altar”.  Por tanto, el que realiza una actividad debe cobrar por ella pero con buen servicio, calidad y precio.


viernes, 16 de marzo de 2018

Fíate de mí


*Charla del periodista Xabi Sanmartín en la Facultad de Periodismo de la USC
para promocionar su Gran Libro del Obradoiro
   Iba a especializarse en economía. Pero se percató que en su sector es mejor no polarizarse.  Trabaja en El Correo Gallego y escribe sobre deportes, cultura, tecnología… A veces lo llaman de la revista Líbero y hace otras colaboraciones no remuneradas. Coordina contenidos en la revista musical La Ganzúa. A veces solo pueden pagar a los colaboradores con una acreditación para ir a un concierto. “Este país no paga por la cultura. Todos hacen descargas gratuitas”.

   La ciudad de Santiago siempre ha sido más de básquet que de fútbol, incluso en los colegios. “San Lázaro no se llenaba nunca, ni en Primera”. El balompié es más hooligan; en el baloncesto  la relación con los árbitros es más humana y familiar. “Es al deporte donde acuden más mujeres y familias”. Fue orgásmico cuando se resolvió aquella pelea judicial de diecinueve años tras la falsificación de los datos de un jugador del Murcia.  Fiebre por el Obradoiro en la cuna del Apóstol. El periodista bilbaíno se echó entre pecho y espalda un programa radiofónico diario hablando de baloncesto en la campaña 2009. Algo inédito en toda España. “Perdí entre ocho y diez kilos”. 
   Pero ha venido aquí a hablar de su libro. Buena edición, tapas duras y 300 fotografías en 272 páginas.  “Me di cuenta que lo antiguo interesaba y había un buen nicho ahí”.

   Son cincuenta entrevistas a gente trascendente en la historia del Club. Con la gente de mayor edad procuraba quedar en persona. Y con los más jóvenes se valía del mail y del teléfono. Muchos querían contrastar lo que él había anotado. Tienen derecho legal a ello pero Xabier recelaba. “Nunca hago eso. Quiero que te fíes de mí. Si tengo dudas en las notas te llamo”.

   “En los años 70 las actas de los partidos eran muy franquistas”. Y era costumbre que los equipos locales de las categorías no profesionales bajasen diez o quince centímetros la altura del aro de la canasta de su ataque. 

   En el Viejo Sar había unas humedades terribles. El río pasaba por debajo. Tenía un ventilador gigante. La superficie era durísima y los jugadores americanos, que ya se preocupaban por el cuidado de su cuerpo, no querían venir aunque se les pagase bien.
   Kendall, “un sol de tío”, compraba marisco a buen precio en la Plaza de Abastos.  Se perdía solo por la ciudad para aprenderse las calles.

miércoles, 14 de marzo de 2018

Olé

Crónica del Manchester United 1-2 Sevilla (en la ida 0-0 en el Pizjuán)
Los de Montella entran en el bombo de cuartos de la Champions


   No daba un euro por el Sevilla. El año pasado en octavos parecía fácil el Leicester y hubo relajación, puntos fatídicos, Schmeichel y Vardy. Dos estilos hoy. Unos cuerpos aptos para jugar en la pintura,Valencia casi más para el rugby, y otros con genética de jockey.   Unos apostando por el juego directo, incluso desde saque del arquero, y otros por fútbol control. Ambos con ambición, alegría y buscando portería. Muy vistoso. Sin ralentí. Sin faltas, sin posesiones estériles. El punto de mira hispalense estaba en el segundo anfiteatro.  Rico intervino en escena dos veces pero muy relevantes en la trama.  Un chut a romper de Fellaini y uno cruzado de Lingard.
   Banega le dejó los tacos a Alexis para marcar territorio. Como si quisiese vengar las dos últimas Copas América. Maravilla estuvo menos decisivo de lo esperado y Éver hoy no cortó el cable rojo. El Mudo, que venía de una mudanza, se hinchaba a regalar pelotas. 
   Entraba la eliminatoria en los minutos del respeto.Ben Yedder salió con el laurel en la cabeza. Aprovechó un pase de tiralíneas de Sarabia para batir a De Gea en paralelo. Era un gol de los que dicen doble. Pero por si acaso hizo otro. Sigue funcionando la jugada de las focas que patentó el Buitre en el Mundial de México. Peinó Correa sin que nadie se preocupase por él y el francés hizo los deberes. El portero de España se escurría sin echarle el guante a la rana.   

   Salieron Mata y Martial como naipes de Joker. El asturiano, en un país de gigantes, no pudo jugar a asociarse.Tuvo que cerrar y correr a tapar un gruyére con las manos vendadas.Mientras N´Zonzi disfrutaba manteniendo un tempo parsimonioso.Lukaku entró cual tifón y Mercado no pudo ni estorbarle.La única vez que el belga no tenía la sombra blanca de Lenglet. Clément fue, de largo, el hombre más determinante del martes 13. Y casi lo redondea con un cabezazo a gol.
  Pocos ingleses creyeron en el milagro. Faltaban dos mordiscos.  Pero los diablos tuvieron orgullo y no bajaron el colmillo. Es de elogiar. Tarjetas ingenuas para Correa y Sarabia. A ver si luego nos arrepentimos. Wissam pudo llevarse el balón firmado pero pensó demasiado y el de la coleta de torero sacó un pie.  Se oían los olés a los llegados desde la Giralda.

lunes, 5 de marzo de 2018

A tolemia romana


*Conferencia da profesora Ana Suárez Piñeiro
Semana Cultural de San Rosendo no Seminario Menor ( 2-3-2018)

   Xa o dicía Obélix.  “Están tolos estes romanos”.Eran ambiciosos e grandes enxeñeiros. O Estado estaba cen por cen implicado na planificación. Non son grandes inventores pero levan a unha escala xamais coñecida técnicas que outros iniciaron.Controlan en monopolio os materiais de construción. Tiñan un número inxente de man de obra disciplinada, o exército.

   “Tódolos camiños conducen a Roma”. Fixeron 100.000 km de vías. Sempre buscaban a liña recta.  Chegaron ó Norte de África, Gran Bretaña e a actual Turquía.  Antes deles as comunidades estaban illadas, os castros, e os camiños eran de terra.  Lugo, Braga e Astorga eran as tres grandes cidades do noroeste de España. Estes vías están vixentes ata o XIX e moitas estradas posteriores seguirán o mesmo trazado.

   Cavaban unha gabia dun metro. Asentaban o terreo con táboas de madeira e logo tres ou catro capas para darlle solidez e resistencia. Poñían grava, argamasa e por riba grandes lousas. Estaba algo combada para que a auga da choiva se escorregase para os lados.

   Ás veces había que sortear obstáculos como ríos. A ponte de Mérida salva o Guadiana ten 60 arcos e unha lonxitude de 750 metros. 
   Procuraban auga potable de calidade.Evacuaban a auga sucia con cloacas de ata metro e medio. Aínda se conservan corenta ou cincuenta acuedutos dos que levantaron. O máis grande é o de Nimes; 50 km de canalización para chegar á cidade, sempre xogando co desnivel pois non tiñan bombas. Chega a 50 metros de altura e está tapado para que non se contaminase a auga.   Máis pequeno é o de Segovia, 30 metros de altura, percorre 17 kilómetros e ten 167 arcos.  En Mérida está o dos Milagros.
  Ás veces os romanos furaban un monte para facer os acuedutos, como o de Albarracín.  Traballaban a pico e pala pois non había dinamita nin motores.

   Buscaban ouro. Escarvaron ata cen metros de profundidade en Rosia Montana, en Dacia que está na actual Rumanía.   E obtiveron 5000 kg de ouro.    Nas Médulas empregaron a auga, que buscaban a máis de setenta ou oitenta km,  como elemento destructivo cando  entraba nas cavidades interiores.  Plinio O Vello deixou constancia disto na súa Historia Natural, que era un compendio de todo o saber da época.  Morreu cando foi a observar o Vesubio no ano 79.
   Foron megaconstructores. O Coliseo levantouse durante a era dos emperadores flavios. Remátase no 79-80. Este recinto elíptico mide 190metros na parte máis alta.Cabían 50.000 persoas. Había tramoias para subir ós animais. É facían naumaquias, é dicir, enchíano de auga e xogaban os barquiños. Estivo en actividade ata o século V. Había xente que vivía en apartamentos alugados e tendas ata o período medieval.  En 1349 sufriu un terremoto e logo expolio das pezas de mármore. 
   O Panteón de Agripa é o templo de tódolos deuses.  Ten unha cúpula de 40 metros de diámetro, nada semellante se fixo ata o Renacemento.

   Os romanos empregaban o formigón. O opus caementicium tiña cal, lava volcánica, que é moi resistente, e auga do mar. “Casi a forma da CocaCola”.  Pola contra, os gregos facían construcións arquitrabadas a dúas augas con columnas e dinteis. Soprendían menos.

   Tiñan un proxecto visionario que quedou a medio camiño: O Canal de Corinto. Foi un pequeno fracaso. Pero era unha tarefa técnicamente imposible na súa época. Para ir do Mar Xónico ó Exeo tiñan que rodear toda a península do Peloponeso. O primeiro que pensou en aforrar eses 400 km foi Periandro, grego do VII a. C. Logo insistiu Demetrio de Macedonia. “Eran de moito pensar e pouco facer”. Os que asumiron o proxecto foron Xulio César, Calígula e Nerón pero os dous primeiros morren axiña. O último deles tocaba a arpa. Suetonio, que fala da vida privada dos emperadores, conta como Nerón colleu a primeira pedra. “Como hoxe os políticos”.  O itsmo non se fará ata 1893. É tan estreito que pasan os barcos xustiños.